jueves, 17 de mayo de 2012

Dos

Lamerse las heridas era la mejor forma que había encontrado para limpiarselas, para purificarse y dejar que el tiempo hiciese cicatriz. Darte de comer no implica ser un buen amo. Se había vuelto desconfiada. Un día más entre la rutina apareció él, vacio de falsas promesas pero cargado de esperanza. El acercamiento fue gradual, no quiso asustarla ni tampoco encariñarse demasiado. El perro al que le das de comer, no siempre responde siendo fiel y obediente. Se había vuelto desconfiado. Y entre historias cotidianas y perjudiciales recuerdos, se sentaban al sol y pasaban las horas, sin expectativas el uno del otro. Sin fecha concreta, el vínculo estaba creado y se habían convertido en algo mas que dos extraños. Eran perra y amo, pero esta vez sin contrato. El mejor pacto es el que no esta firmado, el tácito. Su relación avanzaba mientras el tiempo se detenía y ya no existía mas mundo que perra y amo. Se miraban sabiendo que se necesitaban, que ambos eran reales y que no había lugar a la traición. Sin embargo, cuando rozas la perfección, comienza el inconformismo. Empezaron las exigencias, las nuevas metas, las voces de fuera. Empezó el condicionamiento y terminó la magia. La niebla de dimes y diretes fue haciendose cada vez más opaca. - A mi también me mordió mi perro de pequeño. Me regalaron otro y al principio muy bien pero con el tiempo, son todos iguales y he tenido que sacrificarlo. - Al mio tambien le pegaba su anterior dueño. Conmigo conectó muy bien pero al final, no era lo que buscaba, estaba demasiado resentido y lo tuve que regalar.No era para mi. La desconfianza y el miedo eran enemigos demasiado pesados. Perra y amo dieron por perdida la lucha, eran viejos y estaban demasiado cansados.
Cuando el día no ha empezado pero sabes exactamente como terminará y eso se convierte en tu rutina....es hora de sentarse,cigarro en una mano, cerveza en la otra, y pararte a pensar si quieres que tu vida continúe ese camino. Esos fueron exactamente los pasos que siguió.Al terminar hizo la maleta y unos dias despues, se despidió de familia y amigos para recorrer 600 kilómetros en busca de si misma. El problema no estaba en su vida laboral,familiar o de pareja...el problema era su inconformismo y la necesidad de un más y mejor. Las maletas pesaban más de lo inconcebible y aun asi, se iba vacía. Podía llegar y tenerlo todo o quedarse sin nada pero todo cambio implica un riesgo y ste, necesitaba correrlo.

domingo, 26 de junio de 2011

Le pedi entender y...no entendi


Nadie como el habia traspasado los niveles de la incomprension.
Nadie como el la queria,nadie como el la olvidaba.
Lograba asfixiarla rozandole la piel,escarchaba su alma helada con solo un te quiero.
Y cuando alguno de sus rizos se escapaba a explorar su espalda,cuando disminuia la distancia en la almohada...la hacia desaparecer.
La miraba con los ojos vacios de recuerdos,como si la noche anterior ya se hubiese borrado.
El conseguia estar sin estar, dejar huella hasta volver. Ella esperaba,se mantenia firme en su lucha contra la irracionalidad.
Nunca habia vivido en un mundo con promesas que se disuelven antes que el hielo de su copa,no conocia la tierra donde los te quieros van a morir al mar.
Batallaba contra la cal y la arena, contra miedos y demonios.
Una tarde de sol,uso la arena como fugaz lienzo de los planos del futuro,del mañana que arrastrara la marea.
Alexandra olvidó su escepticismo enrollado entre las sabanas,eliminó sus dudas entre rios de pasion,entre gotas de sudor.
A sabiendas de estar errada,confió.
A sabiendas de estar errada,luchó.

viernes, 10 de junio de 2011


Perdida de nuevo en el mismo callejon pienso en si dejaras abierta o cerraras para siempre la puerta a tu colchon.
Me sobran inseguridades,me falta confianza.Colecciono errores tras la misma alianza.
Vuelvo a tu recuerdo y sonries,siempre sonries.Con un atisbo de delirio en tus sutilezas, me recuerdas que no enturbiemos mas las aguas de un rio ya revuelto.
Aun no has entendido que seguire siendo el remanso de paz cuando me necesites encontrar;que los parasiempres caducan en unos años pero aun asi me arriesgo a firmar.
Las palabras del ayer desaparecieron entre corrientes y la lucidez del ahora era la que necesitaba escuchar.
Gracias

sábado, 4 de junio de 2011

el hombre que susurraba a los pajaros (y a las pajaras)

En aquel primer cafe inocente habia surgido el desconcierto y con el desconcierto,la curioridad.
Su mirada parecia infranqueable,su sonrisa picara,su expresion inocente.
Desconocia el como y el cuando empezaron a hablar sin entenderse,quien manifesto su odio primero,quien disfruto primero de tanta incomprension.
Donde el mundo se hace intimo y la coherencia pierde su nombre,empezaron el perro y la gata a resolver sus diferencias entre nordicos,sexo y plumas de pato.
El en modo galan,ella esceptica.
El prometia hasta que la metia,ella creia sin querer creer,sin querer querer.
En los rankings de etapas vitales,el momento escogido estaba entre el top ten de los peores.
Ambos circulaban por las calles de una ciudad a donde no pertenecian sus pies,ambos caminaban apresurados a un mañana tan ambicioso como tranquilo.
El planificaba,ella se dejaba llevar.Dibujaban planos de un futuro que no iba a llegar.

Alexandra se reflejaba en sus ojos sin entender a donde se habia marchado su mirada.Los impulsos del pasado eran errores en presente continuo,el carpe diem estaba obsoleto,ahora el lema de moda era 'temor por sentir'.
En esos momentos en los que el olor de su colonia se pegaba a la almohada y no existia mas distancia que piel con piel, jugaban a contruir ilusiones de dos que se esfuman al a amanecer,
Dos vasos de agua y un cigarrillo de despues,mas tarde,ella no habia bajado de su particular guion de Woody Allen,cuando el ya tenia encendido el repelente de afectos.
Al parecer en este lugar donde maquillan a polluelos con toxicos sprays,donde se comercializa mas aceite corporal que de girasol...al parecer,en este mundo de innovadoras realidades,exite una subespecie de hombre que cumple todos los requisitos solicitados con un unico pero,esta pogramado para no sentir.

sábado, 14 de mayo de 2011

Quien no arriesga....

En tiempo de cambio, aspiraba polvo viejo.
Cierto trasfondo obsesivo-compulsivo provocaba rutinas de limpieza, relajante natural para las mariposas que devoraban su aparato digestivo.
Recién levantada, sin conservantes ni colorantes, regalaba invitación con sonrisa a todo aquel que quisiera pasar y ver.
Él aceptó. Reticente, pero acepto.
No parecía haber visto muchas como las de su especie, pero hacía que se sintiese cómodo.
En tardes de comilonas y dolores de risa, la teórica de la compatibilidad de caracteres se había extinguido.
Examen práctico, aprobado.
Semejaban detestarse el uno al otro, el otro al uno.
Entre manifestaciones de odio, evitaban escucharse y los desprecios descafeinados eran constantes.Sin embargo, perdidos en otra galaxia, la de las miradas, los dos se decían lo mismo: Gracias.

miércoles, 4 de mayo de 2011

Viviendo entre típicos y tópicos



Eliminó de su agenda algunos minutos de estrés para sumárselos a aquel nuevo fichaje.
Aquel chico con sonrisa de Joker y ojos vidriosos tenía pasión por el diablo aún negandose a ceder su nobleza al purgatorio.
Alexandra, de mirada siempre atenta, lo analizaba.
Analizaba sus silencios y sus palabras. Examinaba su timidez cercana, su curiosidad sana, su cortejo infantil.
En una mesa redonda, mientras se hidrataban en polos opuestos -él batido frio, ella caliente- le preguntó sin sutilezas:

- ¿Realmente todas obedeceis a estos tópicos? Incluso las de gustos más variopintos, las alternativas, las hippies, las románticas o las idílicas respondeis babeando como reflejo al paseillo de cualquier engreido con actitud chulesca enfundado en unos buenos abdominales.

A Alexandra se le agotó la respuesta que guardaba en la recámara. Segundos antes había hecho un comentario que seguía esa misma línea. Incluso ella que siempre había defendido la atracción menos física, el atractivo de las miradas, de jugar con las palabras, de la comunicación piel con piel.
Incluso ella, con tintes alternativos y enraizada en el movimiento hippie, salibaba ante un plato de coresterol, ante aquellos que satisfaccían sus necesidades más primarias de ser dominada por el macho alfa de la manada.
Aquel diablo recubierto con harapos de silencio, le había robado a Alexandra sus mil y una respuestas con escasas palabras.